“Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza”: ¿Quiénes?
La Biblia judeo-cristiana comienza su relato dejando en el
primero de sus Libros, el Génesis, un interrogante no menor cuando anuncia la creación
del hombre diciendo: “Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza”
(Gén. I-6,7).
Si tal Libro fue inspiración de Dios a su
redactor, Moisés –a quien se atribuyen los primero cinco libros
(Pentateuco)-, ¿cómo es que se expresa literalmente en plural: “Hagamos”? ¿Quiénes?¿Cuántos?,
son preguntas que un espíritu libre puede y debe hacerse.
Cierto es que más tarde, en la evolución de las ideas, el
monoteísmo, que también tiene justificación bíblica, lidiará las guerras más
crueles contra el politeísmo.
No obstante, curioso es ver en la historia que los pueblos
politeístas fueron siempre los más tolerantes en materia religiosa sobre
todo.
Recordado es el episodio del capítulo XVII de Hechos de los
Apóstoles, donde Pablo, un Doctor de la Ley, recorre la galería griega de los
monumentos dedicados a los dioses hasta dar con el que decía “Al Dios
desconocido”.
Vale decir que aquellas mentes no se molestaban en que
hubiera una diversidad de progenitores cosmogónicos.
Cuando en el mito de la Serpiente, ésta induce a la mujer a comer
del fruto prohibido así: “serán como dioses”, en ese instante comete el engaño
y el hombre cae.
¿Para qué querrían comer del fruto prohibido, si ya eran “como
dioses”?
Una respuesta para ““Hagamos al hombre a nuestra imagen
y semejanza”: ¿Quiénes?”
bueno, a través de ciertas fuentes e investigaciones encontramos algunas respuestas que pueden sonar un tanto lógicas para dar explicación a esta cuestión:
primero debemos de comprender algo sumamente importante una ley que rige todo lo creado, es la ley de polaridad el cual es visible en la vida diaria, para que se pueda dar la creación de algún nuevo ser viviente se necesita de la colaboración del Hombre y la Mujer al igual que en el reino animal es necesario del Macho y de la Hembra, así de esta forma también para dar la creación de cualquier objeto se necesita la contribución de varios elementos, si logramos comprender esto veremos que una sola cosa o un solo ser jamas podría crear algo, ya que se necesita la contribución de su parte opuesta, entonces a lo que podemos entender que dios es una energía con dos polos capaz de crear nuevos seres.
segundo en varios libros se habla sobre la existencia de los llamados Elohim o grupo de Elohines, los cuales son también según algunos textos fueron los que ayudaron a crear el universo y a los seres que en el habitan.
estas respuestas las hemos resumido al leer varios libros que tratan sobre este tema y al parecer dan una respuesta a esta gran cuestión sobre a quienes se dirigía dios al decir :
“Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza”
bueno, a través de ciertas fuentes e investigaciones encontramos algunas respuestas que pueden sonar un tanto lógicas para dar explicación a esta cuestión:
primero debemos de comprender algo sumamente importante una ley que rige todo lo creado, es la ley de polaridad el cual es visible en la vida diaria, para que se pueda dar la creación de algún nuevo ser viviente se necesita de la colaboración del Hombre y la Mujer al igual que en el reino animal es necesario del Macho y de la Hembra, así de esta forma también para dar la creación de cualquier objeto se necesita la contribución de varios elementos, si logramos comprender esto veremos que una sola cosa o un solo ser jamas podría crear algo, ya que se necesita la contribución de su parte opuesta, entonces a lo que podemos entender que dios es una energía con dos polos capaz de crear nuevos seres.
segundo en varios libros se habla sobre la existencia de los llamados Elohim o grupo de Elohines, los cuales son también según algunos textos fueron los que ayudaron a crear el universo y a los seres que en el habitan.
estas respuestas las hemos resumido al leer varios libros que tratan sobre este tema y al parecer dan una respuesta a esta gran cuestión sobre a quienes se dirigía dios al decir :
“Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza”